Este día se celebra en muchos lugares del mundo, la celebración católica «Fiesta de Epifanía» en la que se conmemora la travesía de los tres reyes magos que fueron guiados por la estrella de Belén para presentarle ofrendas al que se decía era el futuro Rey de los Judíos.
Según al Real Academia Española la palabra epifanía viene del griego epipháneia y significa ‘manifestación, aparición o revelación”.
La historia de estos personajes se revela en un texto bíblico, específicamente, en el evangelio de San Mateo: “Unos Magos de Oriente se presentaron en Jerusalén preguntando: ‘¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido?” Entonces Herodes llamó en secreto a los Magos para que le precisaran el tiempo en que había aparecido la estrella, y los mandó a Belén diciéndoles: ‘Id y averiguad cuidadosamente qué hay del Niño, y cuando lo encontréis, avisadme para ir yo también a adorarlo’.
Hay que destacar, que el Rey Herodes no tenía buenas intenciones para el recién nacido, ya que este pensó que el pequeño disputaria su poder y reynado en el futuro. Los magos, por su parte, emprendieron su viaje, y guiados por la estrella encontraron a María y José junto a su hijo.
Los tres viajeros tenían por nombre Melchor, Gaspar y Baltazar, quienes al ver al pequeño le adoraron y le dieron las ofrendas que cargaban: «incienso, oro y mirra», según el evangelio del apóstol Mateo.
En ese sentido, durante este día se suelen regalar obsequios a los niños, como una manera de representar la acción que tuvieron los magos con el pequeño Jesús al darle las ofrendas.
Además, otro dato importante de esta fecha, es que suele marcar el final de la época navideña ya que muchas familias proceden a retirar los adornos y decoraciones de las festividades del mes pasado.
Finalmente, no se puede dejar de lado, la costumbre de partir la rosca de reyes; una tradición originaria de España que se ha expandido a diferentes lugares de Europa y América Latina; dicho platillo está hecho de pan blanco decorado con dulces y frutos secos, y en su interior hay una figura blanca de plástico que simboliza al niño Jesús.
