La Comisión de Tecnología, Turismo e Inversión de la Asamblea Legislativa ha emitido un dictamen favorable para reformar la Ley de Regulación de los Servicios de Información sobre el Historial de Crédito de las Personas.
Estas reformas permitirán que las agencias de información de datos almacenen y respalden los historiales crediticios de los usuarios en servicios de computación en la nube.
El objetivo principal de estas modificaciones es mejorar la tecnología bancaria y garantizar la continuidad del negocio conforme a estándares internacionales. Al utilizar servicios en la nube, las agencias podrán disponer de medios eficientes para recuperar datos en caso de desastres naturales u otras contingencias, asegurando así la integridad y disponibilidad de la información.
Durante el proceso de estudio de las reformas, los diputados recibieron a representantes del Banco Central de Reserva (BCR) y de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF). Ambas instituciones coincidieron en que las enmiendas brindarán mayores garantías para la protección de la información de los usuarios, ya que tendrán acceso irrestricto al servicio de almacenamiento de las bases de datos en la nube.
Un Comité de Normas será el encargado de emitir los lineamientos técnicos necesarios para cumplir con los estándares de ciberseguridad y protección de datos en la administración y respaldo de los documentos. Este comité velará por el control de acceso, el cifrado de la información y la implementación de auditorías constantes para garantizar la confidencialidad e integridad de los datos almacenados.
Es importante destacar que el uso de servicios en la nube para el almacenamiento de historiales crediticios será opcional para las agencias de información de datos. Podrán continuar almacenando la información localmente si así lo desean. Sin embargo, en ambos casos, deberán garantizar el acceso irrestricto al BCR y a la SSF, tal como lo establece la reforma propuesta.
Estas reformas buscan fortalecer la competitividad del sistema financiero salvadoreño y asegurar que las agencias de información cuenten con el respaldo tecnológico necesario para garantizar la continuidad de sus operaciones, alineándose con las mejores prácticas internacionales en materia de gestión y protección de datos.