Cada año, el Carnaval de San Miguel se desarrolla el último sábado de noviembre, mes en que se celebran las fiestas patronales de la ciudad.
La celebración más grande de la región oriental de El Salvador, el Carnaval de San Miguel, cumplió 15 años de la declaratoria como Bien Cultural, decretada el 5 de noviembre de 2008 por la Asamblea Legislativa mediante el decreto n.º 746.
La declaratoria se publicó en el Diario Oficial n.º 222, tomo n.º 381, de fecha 25 de noviembre de 2008.
Antiguamente, en la Perla de Oriente las festividades se realizaban cada 8 de mayo para conmemorar la fecha de fundación de la ciudad; en estas celebraciones predominaban las transacciones comerciales de mercaderes provenientes de diversas partes de Centroamérica. Sin embargo, en 1939, el Concejo Municipal decidió trasladar el festejo al 21 de noviembre, en honor a la Virgen de la Paz, patrona de los migueleños.
Durante ese tiempo se realizaban fiestas locales en los diferentes barrios de San Miguel. A medida que pasaban los años, los casinos de la localidad desarrollaban festivales danzantes a los que tenían ingreso un reducido grupo de personas. Mientras esto ocurría, en las afueras de estos recintos, el grueso de la población se conformaba con escuchar la música de las orquestas que daban vida a la celebración.
Entre los conjuntos más importantes de esos años estaba la Orquesta Polío, de Paquito Palaviccini y Lito Barrientos.
En 1959, los festejos tomaron un giro diferente con el nombramiento de Miguel Félix Charlaix como gobernador departamental, quien al notar el aislamiento de la mayoría de la población durante las celebraciones decidió que las orquestas tuvieran sus presentaciones en las calles. Dos años después de su inicio, el carnaval tuvo un carácter internacional con la visita del presidente guatemalteco Miguel Ydígoras Fuentes y de las cinco reinas de belleza de Centroamérica.
El segundo carnaval, en 1960, fue el que sirvió de inspiración a Francisco Palaviccini para escribir la canción dedicada a la celebración, melodía que es reconocida a nivel nacional e internacional desde su presentación durante las fiestas de 1961. El ritmo de esta canción es conocido como xuc y está inspirado en la convivencia que las personas de todos los estratos sociales tienen en esa noche.
En la actualidad, las festividades inician con un mes de anticipación con el desfile de Correos y a medida que pasan los días se desarrollan una serie de carnavalitos en los distintos barrios, colonias y cantones del municipio. Uno de los eventos importantes es la elección y coronación de la reina del Carnaval de San Miguel, en el que participan alrededor de 17 competidoras originarias del departamento para llevarse el galardón.
Además, la celebración incluye el desfile de las carrozas que recorre las principales calles de la ciudad, la música y el baile.
La popularidad del carnaval se ha extendido con el paso de los años a todo El Salvador y los países vecinos, tanto por la alegría y la hospitalidad de sus anfitriones, como por las agrupaciones nacionales e internacionales que deleitan al público, lo que atrae a visitantes de otros lugares durante el mes de celebración.
