La madrugada del viernes 25 de agosto se recibió la alerta de un perrito que fue atropellado en Chalatenango.
Pasadas las doce y cuarenta de la noche llegó la alerta a uno de los equipos de IBA que se hallaba haciendo trabajo de campo en Ayutuxtepeque, San Salvador. Una canina, una mestiza comunitaria (que llamaron Negra), había sido atropellada en la colonia Reubicación 2, Chalatenango.
La médico veterinaria y los delegados del área Operativa, de turno durante la madrugada, se desplazaron a la zona para auxiliarla. Encontraron a Negra ensangrentada, con su mandíbula completamente abierta, posiblemente fracturada, y con dificultades para respirar.
Una persona la había resguardado mientras el equipo de IBA acudía a su auxilio. La veterinaria le colocó analgésicos y suero vía intravenosa y Negra fue trasladada de emergencia al hospital para recibir asistencia.
Según el diagnóstico, del impacto con que fue atropellada, Negra sufrió una posible fractura en su mandíbula, lo que le dificulta comer y pone en riesgo su vida. Los médicos, por el momento, están haciendo todo lo posible por sacarla adelante.
El diagnóstico preliminar reveló que la canina tiene luxación (deformación) de la articulación temporomandibular (conexión entre cerebro y mandíbula) y por ello, será sometida a radiografías de cráneo y a una ecografía de abdomen, para asegurar que no haya lesiones en órganos internos.
El rescate de Chester en el mercado vicentino
En otro caso similar, otro grupo que cubría la zona paracentral del país asistió un canino comunitario que fue atropellado en San Vicente llamaron Chester.
En medio de las ventas de comida, sucio, con su cuerpo cubierto de nudos y muy asustado se encontró a Chester. El canino había sido atropellado hace un par de días y deambulaba entre las ventas de atoles y verduras del mercado municipal.
Las mismas comerciantes que lo alimentan y resguardan, alertaron sobre el caso Chester, “el niño consentido” del mercado, y aplaudieron la llegada de los técnicos de IBA que trasladaron al inquieto perrito hacia un centro médico.
Chester ya recibió atención y será rehabilitado de una lesión en su patita trasera derecha. Las vendedoras seguirán cuidado de su “chelito”, como le llaman cariñosamente. El canino regresó anoche mismo al mercado y poco a poco volverá a correr entre los pasillos de verduras, frutas y comida.
