Una orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump impone desde el 11 de abril nuevas obligaciones, sanciones y controles para quienes permanezcan en el país sin estatus migratorio regular.
El 20 de enero de 2025, el presidente Donald Trump firmó la Orden Ejecutiva 14159, una medida que refuerza significativamente la política migratoria del país. La normativa, que entrará en vigor el 11 de abril de 2025, establece un nuevo sistema obligatorio de registro para inmigrantes indocumentados, así como otras disposiciones que endurecen los controles y sanciones migratorias.
Registro obligatorio para inmigrantes indocumentados
A partir del 11 de abril de 2025, todo ciudadano extranjero mayor de 14 años que permanezca en Estados Unidos por más de 30 días deberá registrarse ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU. (USCIS). Esta obligación incluye tanto a nuevos ingresos como a personas que ya se encuentran en el país sin estatus migratorio regular.
El proceso comenzará con la creación de una cuenta en línea en el portal del USCIS. Luego, el interesado deberá completar y enviar el Formulario G-325R, que solicita información personal detallada y requiere una cita presencial para la toma de huellas dactilares, fotografías y firma. Posteriormente, el gobierno realizará una verificación de antecedentes penales antes de emitir un Comprobante de Registro de Extranjero, documento que deberá portarse en todo momento.
Excepciones al registro
Quedan exentos del registro obligatorio aquellos que ya hayan completado el proceso al ingresar al país, así como quienes se encuentren en trámites migratorios activos, incluyendo solicitantes de asilo, refugiados, beneficiarios de TPS, DACA o parole humanitario. Sin embargo, los inmigrantes sin documentación regular y visitantes frecuentes como ciudadanos canadienses deberán cumplir con este nuevo requisito, aun si su estancia es temporal.
Sanciones por incumplimiento
El incumplimiento del registro podría acarrear multas de hasta 5,000 dólares, detención por hasta 30 días y procesos de deportación. Además, todos los inmigrantes deberán portar en todo momento documentos oficiales que acrediten su estatus migratorio. Documentos locales como licencias de conducir estatales ya no serán válidos como prueba.
Cambio de dirección: nuevo requisito obligatorio
La orden ejecutiva también impone la obligación de notificar cualquier cambio de domicilio en un plazo no mayor a 10 días, a través de un formulario electrónico del USCIS. El incumplimiento de esta norma puede afectar procesos migratorios futuros y dificultar la regularización del estatus.
Críticas y preocupaciones
Organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes, como el Centro Nacional de Derecho de Inmigración (NILC), han expresado su preocupación por los posibles efectos negativos de estas medidas. Según el NILC, registros similares en el pasado han sido utilizados para identificar y deportar a personas de comunidades vulnerables.
Abogados de inmigración y activistas recomiendan que quienes se vean afectados por esta normativa consulten con un profesional antes de registrarse, para comprender plenamente sus derechos, los riesgos asociados y las posibles consecuencias legales.