Tribunal Supremo Electoral (TSE) informó que se están preparando para el simulacro del proceso de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP).
Durante el domingo 7 de mayo el TSE realizó pruebas para el simulacro del próximo 11 de mayo en el Parque de la Industria.
Este domingo, en sus redes sociales, publicaron fotografías en las que se ven computadoras y personas que, aparentemente, participarán en el referido simulacro, así como a la presidenta del TSE, Irma Palencia, que verifica las labores del personal de informática.
El Tribunal informó que en las pruebas del próximo jueves “se verificará el funcionamiento del proceso para la transmisión de los resultados preliminares de las elecciones”, lo que permitirá conocer los resultados “de manera pronta, una vez finalizada la jornada electoral”.
Además, el ente electoral encara este simulacro sin un director de Informática el cual no han podido contratar, según han indicado los magistrados. De momento el subdirector es el que está a cargo de la unidad, sin que haya sido nombrado titular de la unidad porque hacen falta algunos requisitos.
La dificultad de contratar a alguien que se haga cargo de la Dirección posiblemente se explique porque el anterior director y subdirector pararon en prisión después de que fueron señalados de incumplimiento de deberes y destrucción de registros informáticos, en las elecciones de 2019, aunque el hecho no repercutió en los resultados.
El próximo jueves se probará el sistema comprado a la empresa Datasys, S. A., cuyo proceso de compra fue duramente criticado por lo elevado de su costo —Q148 millones— cuando, al menos había una empresa que lo ofrecía por Q113 millones que, aseguraba, prestaba el mismo servicio.
En todo caso, los magistrados han asegurado que de haber algún problema con este sistema tiene preparado un “plan B” que es básico, pero funcional, y “hecho en casa” por ingenieros y personal técnico, según la presidenta Palencia.
La transmisión de resultados preliminares se pondrá en funcionamiento el 25 de junio, cuando sea la primera vuelta electoral y consiste en la digitalización de las actas en cada centro de votación con presencia de las juntas receptoras y electorales, así como de los fiscales de los partidos políticos.
