En la noche del jueves, la Fiscalía General de la República (FGR), en coordinación con la Policía Nacional Civil (PNC), ejecutaron registros en diferentes propiedades vinculadas a Gerardo Quijada Orellana, conocido como “Señor Miyagui” en redes sociales, dueño de los talleres GQ Racing Sport y varias personas más que conformaban una red de estafa.
De acuerdo a las investigaciones, esta estructura, liderada por Gerardo Quijada, rentaba locales en zonas de alta plusvalía durante períodos de 3 a 5 años, pagaba el alquiler algunos meses y luego dejaba de abonar.
Cuando los dueños de los inmuebles buscaban contactarse con la sociedad esta ya no existía, figuraba como una sociedad diferente con otro representante legal.
Al intentar recuperar sus pérdidas, las víctimas interponían denuncias pero los abogados contratados por Quijada Orellana dilataban los procesos judiciales y seguían evadiendo los pagos pendientes.
Los inmuebles allanados están ubicados en Santa Tecla, La Libertad y en la colonia San Francisco, San Salvador.
Esta estructura estaba conformada por familiares de Quijada Orellana, abogados y representantes legales de las supuestas sociedades: José René Ventura Alvarado, Jorge Carlos Figeac Cisneros; César Roberto Trujillo Menéndez, Jennifer Marcela Quijada Suncín, Módica Elena Quijada Suncín, Jorge Alberto Cruz, Mirna Elena Suncín de Quijada y Milton Eduardo Chávez Chicas.
A los imputados se les atribuyen los delitos de Estafa agravada, Amenazas con agravación especial, Cohecho y Agrupaciones ilícitas.
Quijada Orellana fue procesado y condenado a más de 6 años de prisión por hechos similares, en donde ocupaba la misma forma de operación para estafar.
Quijada también deberá pagar $929,673.10 a las víctimas como responsabilidad civil por sus acciones.
Durante el registro se incautaron $13,844.00 dólares, celulares, computadoras, un arma de fuego y documentos que vinculan a Quijada Orellana en los ilícitos.
Uno de los allanamientos se lleva a cabo en un apartamento ubicado en la colonia San Francisco, San Salvador.
El inmueble pertenece a Jennifer Maricela Quijada Suncin, hija de de Gerardo Quijada. La imputada servía como testaferro dentro de la estructura.