El final de verano se acerca y el regreso a clases está a la vuelta de la esquina, los chicos aún están en casa y quizás sea el momento adecuado para tener esas conversaciones incómodas que son inevitables en la vida de los padres que tienen adolescentes. Incluyendo el diálogo sobre el valor del dinero, cómo usarlo adecuadamente y administrarlo para sacarle el mayor provecho posible.
Enseñarle a tus hijos la importancia de ahorrar y la creación de un presupuesto promueve la responsabilidad financiera y puede serle de gran beneficio antes de empezar su primer trabajo.
Consientes de esto, y sabiendo que tener estas conversaciones pueden ser un reto para los padres, Chase te comparte varios consejos para que sirvan de guía a la hora hablar de finanzas con los (no tan) pequeños de la casa:
- Háblalo a su manera y más temprano que tarde:
Cuando se trata de dialogar con los hijos sobre dinero, los expertos recomiendan hacerlo lo más temprano posible. Si decidiste tener la conversación ahora, toma en consideración que los adolescentes entre las edades de los 12 y los 18 años están muy influenciados por sus compañeros, grupos de amigos y las redes sociales. Del mismo modo pueden tener una actitud de saber más de lo que realmente saben. Durante estas edades, es recomendable que te resistas a la tentación de pagar por todo. En vez de esto, negocia con ellos para que hagan trabajos en casa.
- Enséñale maneras responsables de ganar dinero:
Al estar fuera de clases, y tener tiempo libre, los adolescentes tienden a gastar más. Sin embargo, es importante enseñarles que el dinero no crece en los árboles y que se debe trabajar por lo que se quiere. Por lo tanto, además de salir a disfrutar de una película, o ver deportes con amigos, buscar un trabajo de medio de tiempo puede ser una alternativa. Así le impartes una lección en torno al valor de cada dólar y cuánto cuesta realmente la vida.
- Preséntale el concepto del presupuesto:
El primer paso para enseñar a tu hijo o hija a establecer un presupuesto mensual es explicarle que consta básicamente de dos partes: ingresos y gastos. Y la regla más importante es no gastar más de lo que se gana. Puede parecer básico, pero la verdad es que muchos jóvenes se tambalean financieramente simplemente porque no se les enseñó a hacer un presupuesto. Para que se te haga más fácil, puedes usar la hoja de cálculo de presupuesto de Chase. Esta sirve de ejemplo para que tu adolescente calcule cuánto tiene y cuánto puede gastar sin dejar de priorizar el ahorro cada mes.
- Apóyalos para que abran una cuenta de ahorros:
Este es el primer paso para empezar a ahorrar con consciencia. Pregúntale ¿Qué quiere hacer con sus ahorros? Esto lo puede motivar y hacer del ahorro un hábito. Al tener su propia cuenta de ahorros, los adolescentes no sólo pueden observar cuánto dinero tienen, y como se va acumulando. Puede que empiece sus ahorros con ayuda de familiares, pero verás como con el tiempo el mismo tomará la decisión de ahorrar lo que acumule en sus cumpleaños, navidad, graduación y otras celebraciones.
