La Fiscalía logró que varios sujetos vinculados a un grupo de exterminio, que operaba en el oriente del país, sean condenados a penas de hasta 1,103 años de prisión.
Esta estructura, conformada por expolicías, exmilitares, vigilantes, un abogado y civiles, asesinaron 32 víctimas. Además, cometieron 2 intentos de homicidio, 12 robos agravados, 6 extorsiones agravadas y agrupaciones ilícitas.
Según las evidencias, utilizaban ropa similar a la de agentes policiales o de soldados y simulaban allanamientos para cometer delitos.
Entre las víctimas de asesinatos hay un maestro y un ingeniero. Otros de los homicidios fueron en contra de pandilleros, personas con quienes tenían problemas o representaban algún tipo de amenaza para ellos.
Los hechos ocurrieron entre 2018 y 2021 en diferentes distritos de Usulután y San Miguel.
Algunos de estos sujetos fueron condenados por el Tribunal Segundo Contra el Crimen Organizado de San Miguel, en ausencia gracias a las reformas del Código Procesal Penal.