Un hombre de 26 años que responde al nombre de Arturo Ceja fue arrestado por agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego en relación con las 32 mil libras de fuegos artificiales ilegales que supuestamente se encontraron en su casa y que llevaron a la detonación fallida del sur de Los Ángeles por lo que deberá comparecer este día ante la corte federal.
Cabe señalar que Ceja fue arrestado inicialmente por cargos estatales después de la explosión del 30 de junio, después de recibir un aviso de que se estaban almacenando fuegos artificiales en el patio trasero de Ceja, por lo que los oficiales de LAPD respondieron a su residencia en East 27th Street.
De acuerdo con los funcionarios de LAPD, en la casa supuestamente encontraron más de 500 cajas de fuegos artificiales de calidad comercial en grandes cajas de cartón dijeron que el hermano de Ceja, de 10 años, también estaba en la casa en el momento del descubrimiento de estos.
También, durante el fin de semana, agentes de la ATF lo detuvieron por cargos federales, por lo que enfrenta una denuncia penal acusándolo de transportar explosivos sin licencia.
Según alegaba la denuncia federal, Ceja hizo varios viajes a Nevada, donde compró los fuegos artificiales y los transportó de regreso a Los Ángeles en camionetas de alquiler, la mayoría de los explosivos se compraron en el Área 51, un traficante de fuegos artificiales en Pahrump, Nevada.
Asimismo, la denuncia señala que los fuegos artificiales en California se pueden vender por hasta cuatro veces lo que los compradores pagan por ellos en Nevada.
Es importante mencionar que mientras trataba de retirar los fuegos artificiales de la casa de Ceja, el Escuadrón de Bombas de LAPD descubrió que algunos de los fuegos artificiales contenían material explosivo, por lo que decidieron que el material explosivo era demasiado peligroso para transportar y colocaron alrededor de 10 libras en un camión blindado especializado conocido como dispositivo de contención total que se utiliza para detonar material peligroso.
Sin embargo, cuando intentaron detonar el material, se produjo una explosión masiva, resultando heridas unas 17 personas y muchos residentes de la zona de la explosión sufrieron daños materiales tan graves que no pudieron regresar a sus hogares.
Si es declarado culpable de los cargos, Ceja enfrenta una sentencia máxima de hasta 10 años en una prisión federal, según la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos.
