Casi un año después de comenzar la campaña de concientización de salud pública destinada a derribar el estigma de la adicción y traer conciencia sobre los servicios de tratamiento disponibles entre los californianos, los datos de la evaluación muestran que es más probable que las personas cambien sus puntos de vista sobre la adicción después de ver y participar compasivamente con la comunidad de personas afectadas por trastornos por uso de sustancias.
La campaña, Unshame CA, es una colaboración entre el California Department of Health Care Services (DHCS) y Shatterproof. La campaña utiliza un enfoque de salud pública basado en la evidencia para aprovechar las redes sociales en la educación, la divulgación y conectar a los californianos con personas con experiencias vividas. DHCS y Shatterproof lanzaron Unshame CA en mayo de 2023.
«A medida que los californianos entienden la realidad del uso de sustancias, el estigma sigue siendo una barrera clave en la prevención, la intervención y el tratamiento,» dijo el director estatal de Medicaid, Tyler Sadwith. «Si bien la epidemia de opioides ha impactado profundamente al estado de California, el estado está logrando avances en la eliminación del estigma de la adicción y en el aumentando de información sobre los tratamientos disponibles.»
«El estigma impide que muchas personas busquen tratamiento, crea aislamiento social e impide el uso de medicamentos que salvan vidas», dijo Courtney McKeon, vicepresidenta sénior de la Iniciativa Nacional contra el Estigma Shatterproof. «La campaña Unshame CA está informada por miembros de la comunidad. A través de sus historias, la campaña se esfuerza por inspirar esperanza y compasión, eliminar las barreras al cuidado y disminuir el número de muertes prevenibles al mal uso de sustancias.»
RESULTADOS DE LA CAMPAÑA: En solo un año, Unshame CA demostró un alcance considerable, con casi el 11 por ciento de los californianos adultos, más de 3 millones de personas, que expresaron haber estado expuestos a la campaña en su primer año. Entre las principales conclusiones de la evaluación de la campaña se encuentran:
El conocimiento de la campaña se asoció con un menor estigma público que aquellos que no escucharon de la campaña.
El 55.2 por ciento de los californianos expuestos a Unshame CA estaban dispuestos a mudarse a la casa de al lado de una persona con un trastorno por consumo de opioides en comparación con el 37.1 por ciento de los californianos que no fueron expuestos.
De manera similar, el 69 por ciento de los californianos expuestos a la campaña están dispuestos a contratar a una persona con un trastorno por consumo de opioides para que trabaje para ellos, en comparación con el 43.5 por ciento de los californianos no fueron expuestos.
Unshame CA fue particularmente exitoso en llegar a la comunidad de habla hispana de California. Teniendo en cuenta la diversidad cultural y lingüística de la población de California, Unshame CA desarrolló el contenido de la campaña para llegar a cientos de miles de californianos de habla hispana. En una evaluación de los usuarios de los medios de comunicación en español:
El 64,9 por ciento de las personas expuestas a la campaña estarían dispuestas a tener como amigo/a cercano a una persona con trastorno por consumo de opioides en comparación con el 49,8 por ciento de los que no fueron expuestos.
El 42.7 por ciento de los usuarios de medios de comunicación en español que estuvieron expuestos a la campaña, expresaron que sabían dónde obtener naloxona (comúnmente conocida por la marca Narcan), en comparación con el 25.5 por ciento de los que no estuvieron expuestos.
En general, Unshame CA es asociada con niveles más bajos de estigma público, específicamente, con la distancia social (tanto en el hogar como en el lugar de trabajo) de una persona con un trastorno por consumo de opioides, actitudes y creencias, o la voluntad de interactuar con una persona con un trastorno por consumo de opioides. Los datos de la campaña Unshame CA también son especialmente alentadores para aumentar la educación, conciencia y el acceso a tratamiento y a las iniciativas de reducción de daños dentro de las comunidades locales.
Las personas expuestas a la campaña tienen más confianza en que pueden encontrar tratamiento para un trastorno por consumo de opioides, saben dónde encontrar y cómo usar la naloxona en caso de sobredosis, y están más dispuestas a tener sitios y clínicas de consumo seguro que proporcionen medicamentos para el tratamiento del trastorno por consumo de opioides en sus vecindarios. Más del 36 por ciento de los encuestados de la campaña indicaron que sabían cómo administrar naloxona, en comparación con el 20.3 por ciento de los encuestados no expuestos a la campaña. Finalmente, el 63.4 por ciento de los californianos expuestos a la campaña están dispuestos a tener una clínica que proporcione medicamentos para el trastorno por consumo de opioides en su vecindario, en comparación con el 43.3 por ciento de los californianos no expuestos.
Uno de los encuestados indicó que la campaña los motivó en su recuperación porque demostró la resiliencia del corazón humano y los ayudó a realizar su propósito de ayudar a otros que aún enfrentan desafíos y estigma.