La Secretaria de Trabajo interina, Julie Su, y la presidenta de la Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo de EE. UU., Charlotte A. Burrows, emitieron hoy una declaración conjunta para conmemorar el primer aniversario de la Ley de Equidad para las Trabajadoras Embarazadas (PWFA) y la Ley de Protección Materna Urgente para Madres Lactantes (PUMP). Acto):
“El 29 de diciembre de 2022, el presidente Biden promulgó protecciones laborales muy necesarias y esperadas desde hace mucho tiempo para las trabajadoras embarazadas y lactantes. Celebramos el primer aniversario de la legislación por la que tantos lucharon durante mucho tiempo para crear lugares de trabajo más equitativos.
“La falta de adaptación a las limitaciones relacionadas con el embarazo y la lactancia han actuado durante mucho tiempo como barreras a la participación equitativa de las mujeres en la fuerza laboral. Es más evidente que nunca que limitar las oportunidades de las trabajadoras embarazadas y lactantes las perjudica a ellas y a sus familias y limita el tamaño de nuestra fuerza laboral y la fortaleza de nuestra economía. Desde que estas leyes entraron en vigor, ya hemos visto que la PWFA y la Ley PUMP están ayudando a respaldar la seguridad económica y de salud de las trabajadoras embarazadas, en posparto y lactantes y sus familias en todo el país.
“La PWFA es un tremendo paso adelante para las familias porque brinda a las trabajadoras embarazadas acceso a adaptaciones razonables, permitiéndoles seguir haciendo su trabajo sin discriminación ni represalias. Esta ley permite a los trabajadores con limitaciones relacionadas con el embarazo, el parto o condiciones médicas relacionadas obtener cambios en el trabajo que podrían ayudarles a mantenerse empleados y saludables durante el embarazo y mientras se recuperan del parto, cuando hacerlo no representaría una carga excesiva para el empleador. Estas adaptaciones pueden ser tan simples como ir al baño con más frecuencia o modificaciones a las políticas de prohibición de alimentos. La ley protege a los trabajadores a tiempo parcial, temporales y estacionales, así como a los empleados a tiempo completo en todas las industrias.
“La Ley PUMP extiende el derecho a un tiempo de descanso y a un lugar privado para extraerse leche en el trabajo a millones de trabajadores de enfermería más y proporciona remedios para los trabajadores de enfermería cuyos derechos han sido violados. Antes de la Ley PUMP, millones de trabajadores tenían que elegir entre no bombear o continuar bombeando y, como resultado, enfrentar posible discriminación, acoso o pérdida de empleo. Las protecciones que la Ley PUMP consagró como ley continuarán facultando a los nuevos padres para extraerse la leche en el trabajo, brindando mayor tranquilidad y reduciendo las posibles consecuencias económicas, físicas y de salud mental para los trabajadores de enfermería.
