Día a Día News
En la madrugada de este 6 de junio, Rusia ejecutó su ofensiva aérea más intensa desde el inicio de la invasión en febrero de 2022, lanzando más de 400 drones y 40 misiles contra múltiples ciudades ucranianas. Kiev fue uno de los principales objetivos, donde al menos cuatro personas perdieron la vida y 49 resultaron heridas, según informaron las autoridades locales.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, confirmó que las víctimas mortales incluyen a tres trabajadores de los equipos de rescate que respondían a las emergencias causadas por los ataques. Los bombardeos provocaron incendios, daños en infraestructuras críticas y la interrupción de servicios esenciales en la capital.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, condenó el ataque, calificándolo de “terrorismo” y reiteró su llamado a la comunidad internacional para que aumente la presión sobre Moscú. “Rusia debe rendir cuentas por esto. Han estado golpeando ciudades y aldeas desde el primer día de la guerra para destruir la vida”, declaró Zelenski.
Este ataque masivo se produce pocos días después de que Ucrania llevara a cabo una operación que resultó en la destrucción de 41 aviones rusos, incluidos 13 en Siberia, causando daños estimados en 7.000 millones de dólares. En respuesta, Rusia también informó haber derribado 174 drones ucranianos durante la misma noche.
La escalada del conflicto ha generado preocupación internacional, con líderes mundiales instando a una solución diplomática y al cese de las hostilidades. Mientras tanto, las autoridades ucranianas continúan evaluando los daños y brindando asistencia a las víctimas del ataque.