Jue. Abr 18th, 2024
Sean y Julianne Steele, de California, siempre se mantenían ocupados en su ministerio como voluntarios, desde ir de puerta en puerta a estar de pie junto a un exhibidor portátil con literatura bíblica. Pero eso de repente cambió cuando en la primavera de 2020 los testigos de Jehová suspendieron su ministerio público, las reuniones y asambleas grandes en persona.

Sean y Julianne Steele, de California, siempre se mantenían ocupados en su ministerio como voluntarios, desde ir de puerta en puerta a estar de pie junto a un exhibidor portátil con literatura bíblica. Pero eso de repente cambió cuando en la primavera de 2020 los testigos de Jehová suspendieron su ministerio público, las reuniones y asambleas grandes en persona.


Dos años después, los Steele aún se mantienen ocupados. Ahora pasan su tiempo como voluntarios escribiendo cartas, enviando mensajes por texto y haciendo llamadas telefónicas con resultados positivos. “Recibimos respuestas mostrando que saben que en realidad nos interesa su bienestar, y que estamos listos para ofrecer nuestro apoyo”, ha dicho Julianne. Sus cartas llegaron a una mujer que tenía COVID-19 y a otra que acababa de perder a su esposo; ambas la llamaron para expresar su aprecio. Con este cambio histórico, los testigos de Jehová crecieron en número un 3% tan solo en 2021 en los Estados Unidos, igualando el aumento más importante para la organización durante la pasada década, y el segundo aumento porcentual más grande desde 1990.


“El mantenernos activos en nuestro ministerio, pero en seguridad, ha tenido un poderoso efecto conservante entre nuestros miembros y las comunidades”, explicó Robert Hendriks, vocero de los testigos de Jehová en Estados Unidos. “La sabia decisión de no reanudar actividades en persona prematuramente, nos ha unido y ha preservado vidas mientras se ha podido consolar a muchas personas en gran necesidad. Los resultados hablan por sí mismos”.


Muchos congregantes, incluyendo Sean, han experimentado otro beneficio de este tipo de ministerio ─ el poder alcanzar a personas con horarios de trabajo ocupados. Después de contactar a un hombre por teléfono, Sean ahora conduce un curso bíblico regularmente con él.

El año pasado, la organización internacional informó máximos sin precedentes en el número de personas que participan en su trabajo voluntario de predicación, aumento en la asistencia a las reuniones por Zoom, y más de 171.000 nuevos creyentes bautizados. En los pasados dos años se han bautizado más de 400.000 por todo el mundo. Después de comenzar un curso bíblico gratuito a su propio ritmo en jw.org/es en diciembre de 2019, Lisa Owen solicitó un estudio bíblico gratuito e interactivo a través deZoom. Ella fue uno de los casi 20.000 que se bautizaron como testigos de Jehová el año pasado en Estados Unidos en un ámbito privado, como piscinas de patios traseros, tinas y hasta en ríos.

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