La Unidad de Bienestar Animal junto con la Alcaldía de San Martín identificaron a los responsables de arrojar fuegos artificiales a un canino mientras este era sujetado; el hecho sucedió en la noche del 24 de diciembre, en la Colonia San Martín.
El suceso se viralizo a través de la redes sociales y este día las autoridades se presentaron a lugar de los hechos para imponer la respectiva sanción. El dueño de la casa y su hija tendrán que pagar una multa de $1,700 dólares; y la misma cantidad fue asignada al propietario de la mascota, además, la sanción que le impide adquirir nuevamente animales de compañía.
El hecho generó indignación en los internautas de las redes sociales.
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