El Departamento de Justicia anunció el pasado 8 de noviembre que Kendall Morgan, de 44 años, ex subalguacil del Departamento del Sheriff del condado de Le Flore (LCSO) en el condado de Le Flore, Oklahoma, se declaró culpable de una violación penal de los derechos civiles por usar fuerza ilícita contra un arrestado.
Según documentos judiciales, el 25 de enero de 2017, mientras actuaba en su capacidad oficial como subalguacil de la LCSO, Morgan agredió deliberadamente a un individuo identificado como DP golpeando repetidamente a DP mientras DP estaba esposado y no se resistía al arresto. El asalto privó a DP de su derecho a estar libre de fuerza irrazonable, no promovió un propósito legítimo de aplicación de la ley y resultó en lesiones corporales para DP.
“Este acusado, un oficial de la ley con experiencia, está siendo considerado responsable de lesionar ilegalmente a un hombre esposado que no se resistió al arresto y no pudo defenderse”, dijo la Fiscal General Auxiliar Kristen Clarke de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia. “El Departamento de Justicia se compromete a enjuiciar a cualquier oficial que viole su posición y autoridad mediante el uso de fuerza excesiva sin causa”.
“Todo ciudadano tiene derecho a recibir un trato justo y los agentes del orden deben ser modelos de este principio tan importante”, dijo el Fiscal Federal Christopher Wilson para el Distrito Este de Oklahoma. “Las acciones del acusado en este caso fueron ilegales, inmorales y poco éticas, y la justicia exige que él enfrente las consecuencias de sus actos”.
«Señor. Las acciones de Morgan no solo violaron los derechos civiles de su víctima, sino que también comprometieron la confianza del público en el sistema de aplicación de la ley”, dijo el agente especial a cargo Edward J. Gray de la oficina de campo de la ciudad de Oklahoma del FBI. “El FBI se compromete a responsabilizar a quienes abusan de su autoridad y salvaguardar las libertades civiles de todos los estadounidenses”.
Morgan enfrenta una sentencia máxima de 10 años de prisión, tres años de libertad supervisada y una multa de hasta $250,000. Aún no se ha fijado una audiencia de sentencia.
El fiscal general adjunto Clarke, el fiscal federal Wilson y el agente especial a cargo Gray hicieron el anuncio.
La oficina de campo de la ciudad de Oklahoma del FBI investigó el caso. Están a cargo de la acusación en el caso el Fiscal Federal Auxiliar Jarrod Leaman para el Distrito Este de Oklahoma y el Abogado Litigante Avner Shapiro de la División de Derechos Civiles.
