Hialeah es una ciudad estadounidense en el estado de Florida en el condado de Miami-Dade, en el cual, hasta 2010 se registró que su población era de 224,669 habitantes, con ello se convierte en la quinta ciudad mas grande el estado de Florida. La ciudad se encuentra en un valle entre la Bahía de Biscayne y los Everglades cerca de las playas de Miami Beach, con una población casi 100% latina.
En sí, casi el 96% de sus residentes son hispanos o latinos, y es por ello que esta ciudad es catalogada como la ciudad más hispana de los Estados Unidos y por tanto, donde más se habla español.
Casi la totalidad de las personas que allí viven tienen un origen común y es que comparten una herencia hispana, lo que le confiere el título de la menos diversa entre las grandes ciudades estadounidenses y la que tiene mayor cantidad de hispanos con un 95.64% de su población total.
Hialeah es la ciudad que cuenta con mayor porcentaje de población de habla hispana en Estados Unidos con cerca del 90% de la población, la mayoría de ellos, cubanos exiliados desde el triunfo de la Revolución en 1959, y sus descendientes cubanos y el continuo flujo de cubanos de la isla para reunirse con sus familiares.
Los cubanos, puertorriqueños, los mexicanos y otros grupos de hispanos conforman la población en Hialeah. La ciudad vive de la constante inmigración de sus ciudadanos, pues el 72,75% de sus pobladores han nacido fuera de los Estados Unidos.
En cuanto a la diversidad lingüística, Hialeah es la ciudad del país con menos población que utiliza el inglés en su hogar (6,4%) y con más habitantes que usan el español (93,1%), de los que más del 64% reconoce no hablar “muy bien” inglés.
Pero seguramente te haces la gran pregunta ¿cómo ocurrió esto?
Tras el triunfo de la Revolución en los años 60´s, Hialeah se convirtió en hogar de miles de cubanos. Luego vendrían en los 80 y los 90 el éxodo del Mariel y la «crisis de los balseros», cuando cientos de miles de personas salieron de la isla para empezar una nueva vida en EE.UU. Y una gran mayoría eligió Hialeah, animados por la experiencia de familiares o amigos.
Gracias a estos hechos, Hialeah se convirtió en un centro de clase netamente trabajadora, de clase obrera. Las pocas factorías de Miami están en Hialeah fabricando ropa y textiles.
Esa realidad fue plasmada por el cineasta Joe Cardona en su largometraje de 1999 «Agua, fango y factoría» (frase con la que se conoce a Hialeah), y con el que recorrió festivales del país mostrando al mundo la ciudad en la que vivió hasta los 18 años.