Los dirigidos por William Ponce se impusieron en dos de los tres choques celebrados en el Enrique «Trapo» Torrebiarte, como parte de la preparación para los Juegos Centroamericanos del mes de octubre en tierras chapinas
La selección nacional mayor de béisbol de El Salvador se impuso en la serie de fogueo ante su similar de Guatemala, al ganar dos de los tres choques disputados entre jueves y viernes en el diamante del estadio Enrique «Trapo» Torrebiarte, de la capital chapina.
El equipo dirigido por el “Tigre” William Ponce cayó en su primer compromiso el jueves 6 de agosto con marcador de 4 carreras por 2, encuentro en el que abrió y salió derrotado el lanzador Víctor Salazar, admitiendo las cuatro anotaciones.
El viernes se disputó una doble tanda, ambas victorias para la selección cuscatleca. A primera hora, la novena salvadoreña se impuso 12 carreras por 5 con triunfo desde la lomita para el relevista Jimmy Artiga.
Una remontada en la séptima entrada cristalizó la segunda victoria en la serie en el choque de fondo, con marcador de 2-1, con triunfo para Williams Louico y juego salvado para José Roca. El zurdo Nelson Alfaro abrió por la selección. Los nacionales llenaron las bases en el primer episodio, pero faltó el remolque para abrir el marcador desde temprano.
Esta serie de fogueo forma parte del plan de trabajo del seleccionador mayor con miras a la participación del conjunto en los XII Juegos Deportivos Centroamericanos, Guatemala 2025, a disputarse del 18 al 30 de octubre en el país vecino.
El plan de trabajo del manager Ponce y su cuerpo técnico se viene desarrollando desde el mes de enero y con este fogueo se suman tres ventanas de preparación en el exterior. En el mes de junio, El Salvador se coronó campeón de la Copa Centenario, celebrada en el diamante del estadio Antonio Escarré de Costa Rica, torneo ganado de manera invicta ante equipos de Nicaragua, Guatemala y el país anfitrión.
En julio, el seleccionado viajó a Nicaragua para medirse en una ocasión a Los Dantos, de la Liga German Pomares, y en tres oportunidades a los Indios de Bóer del circuito profesional. Pese a que no se obtuvieron victorias en tierras nicas, el campamento fue satisfactorio al enfrentar a jugadores profesionales de gran renombre para foguear de la mejor manera a los peloteros nacionales y tomar nota sobre los aspectos a corregir.